·> Escuchar la canción que te hace recordar a 'esa' persona especial.
En los tiempos actuales, con la tecnología que tenemos al alcance de la mano, que nos acompaña en cada momento de nuestra vida, en ocasiones a propósito, en ocasiones sin darnos cuenta de la forma en que estamos inmerso de comodidades impensables cuando apenas despegábamos medio palmo del suelo.
Hoy en día, podemos elegir la música que nos apetece, la melodía con la que queremos despertarnos, hasta podemos incluso llegar hasta el punto de que cuando tenemos noticias de alguna persona especial, ya sea mediante una imagen, ya sea mediante los 'sones' de esa canción que tan buenos recuerdos nos trae.
Hasta hace bien poco, no disponíamos de tantas ventajas, ni las teníamos accesibles desde tantos sitios como hoy en día.
Hoy en día, podemos elegir la música que nos apetece, la melodía con la que queremos despertarnos, hasta podemos incluso llegar hasta el punto de que cuando tenemos noticias de alguna persona especial, ya sea mediante una imagen, ya sea mediante los 'sones' de esa canción que tan buenos recuerdos nos trae.
Hasta hace bien poco, no disponíamos de tantas ventajas, ni las teníamos accesibles desde tantos sitios como hoy en día.
·Cuando la única posibilidad de escuchar música, además de ir tarareando por dentro esa canción, cuando debíamos esperar a estar ya fuera en nuestra casa, o en casa de quien había podido encontrar la forma de ahorrar un poco para tener "Una Arradio", con la que alegrar esos momentos del día, estar al tanto de las noticias, oír a través de esa caja mágica las canciones que sabíamos de oídas que estaban causando furor en "La Capital del Reino".
Cuando solo podíamos elegir entre un par de emisoras, que según el día de la semana, la hora del día, ponían una y otra vez los mismos programas, las mismas entrevistas, el mismo tipo de música.
Cuando debido a que solo podíamos permitirnos un aparato, no como hoy en día, que a poco que nos despistemos, lo habitual es encontrar con bastante facilidad más de un tipo de 'emisor' para cada un@ de los que forman la unidad familiar, teníamos que negociar según el momento que emisora sintonizábamos, esperando oir alguna de esas canciones que tanto nos decían.
Sí, era un momento mágico cuando ibas por la calle, y empezaban a llegar notas que te sonaban, que hacían que la piel fuera poco a poco cambiando de estado, y de forma lenta pero imparable notabas como se erizaba.
Buscar excusas para aminorar el paso, sin que notara demasiado, para deleitarT un poco más con la sensación de que esas vibraciones en forma de notas musicales, se apoderaban de TI, cubriendo tu pelo, abrazando tus mejillas, descendiendo por la espalda hasta acomodarse en el vientre, alrededor de ese remanso de paz, con forma circular, que tanto nos une.
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Cuando solo podíamos elegir entre un par de emisoras, que según el día de la semana, la hora del día, ponían una y otra vez los mismos programas, las mismas entrevistas, el mismo tipo de música.
Cuando debido a que solo podíamos permitirnos un aparato, no como hoy en día, que a poco que nos despistemos, lo habitual es encontrar con bastante facilidad más de un tipo de 'emisor' para cada un@ de los que forman la unidad familiar, teníamos que negociar según el momento que emisora sintonizábamos, esperando oir alguna de esas canciones que tanto nos decían.
Sí, era un momento mágico cuando ibas por la calle, y empezaban a llegar notas que te sonaban, que hacían que la piel fuera poco a poco cambiando de estado, y de forma lenta pero imparable notabas como se erizaba.
Buscar excusas para aminorar el paso, sin que notara demasiado, para deleitarT un poco más con la sensación de que esas vibraciones en forma de notas musicales, se apoderaban de TI, cubriendo tu pelo, abrazando tus mejillas, descendiendo por la espalda hasta acomodarse en el vientre, alrededor de ese remanso de paz, con forma circular, que tanto nos une.
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