30 jun 2009

Oasis

. 30 jun 2009


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Algo Aislado, casi en Soledad, Acompañado del Tiempo, Hasta Q LLegasT, Oasis sin más

Razón tiene quien dice que con frecuencia, no es tanto estar solo como sentir la Soledad.

Razón tiene quien afirma que muchas de las cosas las apreciamos después de haberlas saboreado.

Recuerdo la primera vez que me invitaron a probar el Jamón de calidad, el que normalmente llamamos 'Pata Negra'.
Hasta ese momento, dado su alto precio, su escasa disponibilidad, había probado como la mayoría solo el jamón serrano normal.
Con sabor, con su aroma, incluso con su textura tan peculiar, y me parecía desorbitado el precio que en ocasiones tenía ese otro jamón, el 'pata negra'.

En esa primera ocasión, me invitaron a una charcutería, y la verdad, pensaba que íbamos a pedir un bocadillo, lo habitual en una ocasión como esa, para seguir trabajando, hablando, aprovechando el tiempo, saboreando el momento, el poder estar.

·Sin embargo, al llegar a la charcutería, en vez de quedarnos en la parte donde atienden, donde están expuestos los productos, donde puedes elegir, en vez de quedarnos donde se supone que debíamos estar, seguimos hasta el final, donde el expositor se convertía en un mostrador, donde en ocasiones había visto dejaban los pedidos que algunas personas se iban a llevar.

A partir de probarlo, de dejar que poco a poco su aroma, su sabor fuera adueñándose de cada papila gustativa, que me hiciera conocer semejante manjar, hasta ese momento, no pude apreciarlo, no podía saber lo que significaba, lo que a partir de ese instante quería repetir.

Algo similar ocurre con quien conocemos, con las cosas que tenemos, con los lugares que conocemos.

A pesar de no estar solo, de encontrarme como casi siempre en buena compañía, de vivir como había vivido, al encontrar con quien compartir momentos, al encontrar a quien busca la forma de sorprender, al llegar a este punto, tienes la impresión de que algo de lo que has hecho hasta el momento está a punto de cambiar.

Tener la necesidad de buscar la forma de llegar a ese remanso de paz, donde sabes te encontrarás bien, donde puedes descansar, olvidarte por momentos, horas, días incluso de como sigue el resto del mundo, lo que algun@ llaman normalidad, y para l@s que lo compartimos es lo único que hay, lo que vemos, vivimos, lo que sabemos guardar.


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